Lápiz Perfecto Graf Von Faber-Castell
Partiendo del famoso lápiz con alargador de 1885 surge la idea de desarrollar un excepcional obsequio para los sentidos simplificado al máximo para no desvirtuar su esencia: el estuche número uno. Símbolo de la discreción del lujo y realizado en materiales selectos, se distingue por su diseño clásico de formas acanaladas. Continuando una tradición de más de cien años y conocedores de que el placer de escribir y dibujar depende del afilado del lápiz, los juegos de lápiz perfecto fusionan todo lo necesario para escribir, corregir y afilar en una única pieza. Versátiles y fáciles de usar, representan un microcosmos de alta funcionalidad.